viernes, 9 de noviembre de 2018

Con C de Cretino



Fecha de publicación: Abril 2017

Longitud aproximada: 250 páginas

Sinopsis:

  ¿Quieres que te dé un consejo? Sí, a ti, al que está leyendo esto. Ve siempre con la verdad por delante; aunque duela, dila. Yo siempre lo hago y por ahora, me va bien. Normalmente no me creen, pero ese ya es su jodido problema. Si quieres que duerma contigo o esperas que te prepare el desayuno, lo llevas mal; mal no, fatal. Yo no duermo con nadie, es más, me molesta hacerlo. Y no te voy a regalar bombones, ni pienso arrastrarme en busca de tu cariño. Si me quieres, tómame, pero tengo fecha de caducidad, como todo lo bueno en esta vida. 

  Si sigues mi consejo te irá todo bien. Quizá te insulten, tal vez te odien, pero serás feliz. Los problemas aparecen cuando te mientes a ti mismo, cuando llega un punto en el que no sabes cómo ni por qué, pero lo que empezó con un juego, se ha convertido en una obsesión. Cuando tienes ganas de dormir con esa persona, cuando ese alguien no te corresponde, cuando está prohibido… Para eso… 

  Para eso no tengo putos consejos. 

  James Cooper.


Mi pequeña opinión


  Lo primero, lo siento, sé que mis reseñas están saliendo a cuenta gotas, que en los últimos meses apenas he publicado un par de ellas, pero asuntos personales están acaparando todo mi tiempo y el reseñar ha quedado en segundo o tercer lugar. Mi vida familiar merece ahora toda mi atención y dedicación. Espero, aunque sea así, poco a poco, no tener que dejar de lado el blog ni mis perfiles en redes y poder seguir compartiendo con todos vosotros esta pasión por la lectura. Ahora os dejo con lo importante, con lo que os trae aquí de vez en cuando, la reseña.


  Este es uno de esos libros que leo por impulso, necesitaba un libro cuyo apellido del autor comenzará por Q  para uno de mis retos y, revisando mi Kindle me llamó esta portada. ¿He dicho que me gusta la erótica?? Si, muy posiblemente, suelo ser algo pesada y repetirme a menudo. La cuestión es que me puse a leer el libro sin más, a ver que me encontraba. 

  Se trata de una historia actual, contada por un protagonista masculino, James, hasta ahí todo genial. Se expresa bien, con un lenguaje duro y directo (como podéis ver en la sinopsis), incluso soez, con frases cortas pero que dan sentido al personaje, un chico que ha sufrido un fuerte desengaño y que ahora está a vuelta de todo, se sabe guapo e irresistible para el género femenino (meeec) y no se anda con flores ni halagos para conseguir una noche de sexo, vamos, un quemabragas muy pagado de sí mismo.


  La historia se iba desarrollando más allá de las típicas escenas de cama y no iba nada mal pero mi sensación de estar perdiéndome algo era cada vez mayor. Y es que en muchos casos el libro carece totalmente de ambientación, de descripciones, como si a la autora se le hubiese pasado escribir esa parte, y yo cada vez entendía menos. Mi mosqueo era ya grande y decidí leer las opiniones de otros lectores en Goodreads. Y ahí descubrí qué demonios pasaba…

  Pues es que resulta que este libro es la versión masculina de otra novela de la autora, Doble tentación, en donde se relata esta misma trama pero desde el punto de vista de la protagonista femenina, Sara. Vale que se suban al carro de las modas (aunque resulten cansinas), vale que quieran estirar el chicle (la novela) y sacarle el jugo a la historia hasta que ya no de más de sí, vale incluso que quieran complacer a esas lectoras que constantemente quieren saber más y más sobre unos personajes pero ¡¡leñeee!!... Hacerlo bien ¿no? A ver… ¿tan difícil resulta poner una nota en la sinopsis?? ¿O en la portada?? ¿O en algún puñetero lado?? O más sencillo aún… ¿tan complicado resultaría escribir el libro en condiciones? Con su correcta ambientación, sus descripciones, con todo lo necesario para que el libro se pueda leer tranquilamente. 

  Está claro que en esta ocasión, la autora ha preferido ahorrarse unas páginas y un poco de trabajo y que seamos los lectores quienes tengamos que hacer investigación por nuestra cuenta si queremos cubrir ciertas lagunas. O buscar la opinión de otros lectores para aclarar nuestras dudas. Y eso es algo de lo que yo ya estoy un poquito harta (bastante), a mi me gusta leer y que la historia me llene, no que me deje a medias. Y no me da la real gana de tener que andar buscando información antes de leer, o de tener que averiguar si un libro pertenece a una serie, saga, bilogía o trilogía, de tener que ser yo quien se preocupe si su autor no se ha molestado en indicarlo en ninguna parte. De ahí que en esta ocasión, aunque el libro me ha resultado grato, incluso estuve un rato enganchada, mi valoración general no es todo lo buena que podría haber sido. 


  ¿Volveré a leer a esta autora? En estos momentos, lo dudo. No me ha dejado esa sensación que busco al leer debido al problema que os he comentado. Tan solo recibiendo muy, muy buenas recomendaciones de lectores amigos sobre alguna nueva novela volveré a darle su oportunidad.

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